PACHERI RELLENOS DE ESPINACAS Y CHAMPIS

¿Alguna vez os he dicho que adoro la pasta? me imagino que si, pero es que hablo tanto que ya ni me acuerdo. En casa mínimo una vez a la semana cae, si no son macarrones, espaguettis, linguinis, raviolis o incluso unos pacheri como pasó en esta ocasión. Para quien no los conozca son cilindros de pasta de tamaño más pequeño que un canelón y más grande que un macarrón, un termino medio para no disgustar a nadie. Se pueden rellenar de multitud de cosas, combinan muy bien con unas gambas, pescado y unos palitos de cangrejo, aunque si os digo la verdad me pierde la pasta con espinacas, me parece una combinación perfecta, así que aunque seguro que muchos de vosotros ya la preparéis así voy a poner la receta igualmente  por si hay algún despistad@.

NECESITAMOS ESTOS INGREDIENTES: 

Para la bechamel : 

60 gr de harina 

60 gr de mantequilla 

Un litro de leche. 

Para el relleno:

Un paquete de pacheri.

Un par de  ramilletes  buenos  de espinacas frescas o puede usarse congelada , es indiferente. 

Unos champiñones (aproximadamente unos 200 gramos)

Media cebolla grande o una pequeña, un diente de ajo, aceite de oliva. 

Un poco de salsa de tomate casera ( a ser posible).

Queso rallado para gratinar (el que más os guste)

LO PREPARAMOS ASÍ DE FÁCIL:  

Lo primero que vamos a hacer es cocer los pacheri, para ello ponemos una olla al fuego con abundante agua y cuando comience a hervir le añadimos la sal y los echamos removiendo con cuidado para no romperlos, dejamos durante unos 10 minutos (seguimos los consejos del fabricante), no tienen que quedar muy blandos, para detener la cocción los paso por debajo del grifo de agua fría y los dejo escurrir bien sobre un paño de algodón ( limpio , eso si ) . Reservamos.

Ahora preparamos el relleno para ello ponemos un poco de aceite en una sartén  y cuando este caliente echamos la cebolla que previamente habremos cortado en trocitos muy pequeños. Dejamos pochar , y cuanto vaya tomando color   le añadimos el ajo muy picado , dejamos unos segundos con cuidado que no se nos vaya a quemar y le echamos los champis laminados y las espinacas. Las espinacas si son muy tiernas como era mi caso no hay ni que escaldarlas ya que se hacen en un segundo , si son congeladas las coceremos primero y escurrimos bien.  Rehogamos bien hasta que pierdan el agua y reservamos.

Ahora nos ponemos con la bechamel: para ello echamos la mantequilla en un cazo y cuando se haya derretido le echamos la harina removiendo con unas varillas , es muy importante este paso si no queremos que nos sepa a crudo, tenemos que dejar que nos tome un poco de color sin tostarse demasiado. Le vamos añadiendo poco a poco la leche caliente mientras no paramos de remover, al principio parece que no va a dejar de ser una pasta grumosa, pero vamos a ir viendo que poco a poco desaparecen. Removemos durante unos 12 minutos para que no se pegue. Le añadimos sal, se le puede poner nuez moscada, pimienta, aunque personalmente para este plato la prefiero sin nada más .

Echamos una cuarta parte de la bechamel ( más o menos eso va a gustos) sobre el relleno y removemos bien. para que se integren todos los ingredientes.

Ahora solo nos queda montar el plato, para ello vamos a poner un poco de tomate en una fuente apta para horno , solo untar, lo sufiente para que no se nos pegue. Con una cuchara vamos rellenando todos los pacheri con la mezcla que preparamos anteriormente y los ponemos sobre el tomate.

Cuando tengamos todos preparados le echamos la bechamel sobrante por encima ( yo la aligero un poco más con un poco de leche para que quede muy cremosa)

Espolvoreamos de queso por encima y lo gratinamos en el horno que previamente habremos encendido durante unos 10/12 minutos. 

Este plato en casa nos encanta, espero que a vosotr@s también os guste.