Holaaaaaaaaaaaaaa, ya sé que lo mío es algo muy raro, o actualizo continuamente o no lo hago en semanas, pero no iba a dejar todo el fin de semana unos macarrones en el blog y aprovechando que es domingo os dejo estos ricos pepitos para la merienda. porque.. ¿a quién no le gustan unos pepitos? son tan tiernos y suaves que no te conformarás con comer solamente uno. Sé pueden rellenar de nata o trufa, pero os confieso que mis preferidos son los de crema pastelera.
No son los primeros que publico, y seguramente tampoco serán los últimos, ya que como todo en esta vida, seguro que se pueden mejorar. Todo consiste en probar y modificar las recetas para adaptarlas cada un@ a nuestr@s gustos. A medida que vamos practicando, le quitaremos el miedo y aunque no siempre nos salgan las cosas como queramos, no debemos dejar de insistir hasta que lo consigamos. Si de algo puedo presumir es de cabezonería, os aseguro que tengo un master (y de los gordos), aunque no siempre es una virtud y en ocasiones me trae más de un quebradero de cabeza. Bueno, no voy a liaros con mis experimentos, así que solo deciros que de momento he vuelvo a hacerlos modificando cantidades, he reducido la cantidad de levadura, he cambiado el agua por leche y además le añado un poco de miel. Al hacer estas modificaciones, la cantidad de harina varía levemente. De momento me quedo con esta receta, que no quiere decir que sea la definitiva, pero os garantizo que estan muy, muy tiernos.
NECESITAMOS LOS SIGUIENTES INGREDIENTES:
Para la esponja:
100 gr de harina de fuerza
15 gr de levadura
50 gr de agua.
Para la masa:
430 gr de harina
200 gr de leche
5 gr de sal
100 gr de azúcar
10 gr de levadura
100 gr de mantequilla
Azúcar glass para espolvorear por encima.
PARA EL RELLENO
Crema pastelera
ASÍ LOS PREPARAMOS:
Lo
primero que vamos a hacer es la esponja y para ello, mezclamos la
levadura con el agua tibia y vamos añadiendo harina hasta formar una
masa que no se nos pegue a las manos. Si es necesario le podemos añadir
un poco mas de harina. La sumergimos en un bol con abundante agua
templada y cuando flote ya estará lista para usar. También podemos prepararla el día antes y dejarla en la nevera hasta el día siguiente.
En
la panificadora: ponemos la leche , la miel, la sal, el azúcar, la harina y la
masa levadura y programamos al número 7, o sea masa para pasta. Si
necesitamos mas harina le vamos añadiendo a cucharadas. Depende de la
calidad nos hará falta mas o menos, a mí hay veces que me llega y otras
veces le tengo que añadir una poca, la masa tiene que pegar ligeramente, pero no en exceso.
Cuando finalice el programa le añadimos la mantequilla a trocitos y volvemos a programar de nuevo durante otros 15 minutos. Cuando le falte tres o cuatro minutos para que
finalice le añadimos los 10 gr de levadura desmenuzada.
Para amasarla a mano:
Formamos un volcán con la harina y en el centro añadimos la leche con la levadura diluida, el azúcar y la miel, la sal la pondremos alrededor de la harina para que no toque la levadura. Vamos integrando poco a poco la harina y amasamos hasta formar una masa lisa y con buena membrana.
Una vez que la tenemos lista, le añadimos la mantequilla y amasamos de nuevo, al principio parecerá que no se nos va a integrar, se convertirá en una masa pegajosa, no le debemos añadir harina, la seguimos trabajando, con un poco de paciencia, se nos volverá a convertir en una masa lisa y brillante.
A partir de aquí el procedimiento es el mismo para ambos amasados:
La ponemos en un bol que habremos untado con aceite de girasol y tapamos con papel film, dejamos levar.
Formamos los bollos de unos 50/ 55 gr y dejamos levar de nuevo.
Pincelamos con leche y ponemos sobre una bandeja de horno forrada con papel, horneamos a 180º (precalentamos previamente durante 10 minutos) durante aproximadamente 15 minutos.
Dejamos enfríar, cortamos al medio y rellenamos de crema pastelera.
Espolvoreamos con un poco de azúcar glas y listo calisto.
Pues haleeeeeeeee, venga, manos a la obra.
Con este dulcerío os deseo que acabéis bien el domingo y comencéis bien la semana.
Que si me apetecen????????? Ya me gustaría poder probarlos, aunque me queda claro que, como tú dices, tendré que ponerme manos a la obra... ya veo que has ido adaptando la receta a tu gusto y que el resultado es fantástico
ResponderEliminarAbrazos!!!
mmmmmm... que pintaza!! esto si que son pepitos y no los de lomo!!! yo creo que tambien me quedo con el relleno de crema pastelera. Te an quedado divinos.
ResponderEliminarUn saludo!!
Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiii , ya sabes que me apetecen pero hasta que lleguen los refuerzos de nuevo no hago nada pues sino me lo como yo todo y mis cartucheras luego no me permiten guardar el revolver para ser el mas rápido del Oeste como debería jajajaja.............Claro, otra cosa sería que yo estuviera ahi cerquita y entonces sí que la ibamos a armar , dos cabezonas juntas jajaja.....
ResponderEliminarSigue así , alegrándonos la vista y que vivas tu y tu blog por muchísimoooooooooo tiempo !!!
Besinos.
Vecinita pero como me haces esto a estas horas uummmmmmmmmm que ricos estos pepitos de buena gana me comia uno te han quedado de relujo como todo lo que haces que manos tienes xiquillla.
ResponderEliminarPero echo en farta una cosa ...siiiiiiiiiii er video lo haces genial y me encanta verte con las manos en la masaaaaaaa.
Bicos mil potita miaaaaaaaaa.
...pero que pintaza tienen estos pepitos de crema.....ummmmmm!!! receta guardada, gracias Maky!!!
ResponderEliminarQue receta mas rica y apetecible, como siempre un recetón .MUCHOS BESOS DE LAS RECETAS TRADICIONALES DE COCINA.
ResponderEliminarApetecen!, sí que apetecen! Se los ve muy espnjosos y tentadores.
ResponderEliminarBesos hoy desde
http://siempreseraprimavera.blogspot.com.ar/2015/04/conservacion-de-pimientos.html
A mí síiiii !!
ResponderEliminarQué pinta Maki, tienen que estar tiernos tiernos y super-ricos!
que buena pinta, me gustan este tipo de masas y con la cremita que ricos.
ResponderEliminarbesoss y buen finde
Riquísimas se ven !!!
ResponderEliminarBesos crisylaura.